Parque de la Serreta, en Rubí

Sus cuatro tramos de toboganes gigantes son, sin duda, el principal reclamo para los peques, aunque el parque que os proponemos visitar con niños tiene muchos más elementos que lo convierten en un buen destino para ir a pasar una mañana o una tarde.

También encontraremos un rocódromo, circuitos dibujados en el suelo para jugar a la rayuela (xarranca en catalán), estructuras de juego pensadas para el desarrollo psicomotriz, emocional y cognitivo de los niños y niñas, áreas de juego libre... y todo en un espacio concebido desde la sostenibilidad , puesto que muchos de los juegos están elaborados con materiales reciclados o fácilmente reciclables.

Todas las estructuras de juego se encuentran a nivel de suelo, con el objetivo de que el parque sea lo más inclusivo y accesible posible y carezca de barreras.

Y mensajes a los padres y madres: vigilad con la espalda si queréis bajar por los toboganes. Los niños son de goma, ¡pero nosotros no!