El Puente del Diablo de Tarragona: 5 curiosidades sorprendentes

Alrededor de la espectacular acueducto romano hay un interesante parque ecohistórico en que convergen patrimonio y naturaleza.

Uno de los elementos patrimoniales más característicos de Tarragona es el Pont del Diable (Puente del Diablo), por lo que visitarlo es imprescindible. Y es, además, muy adecuado hacerlo con niños y niñas, ya que podréis realizar actividades con un alto contenido pedagógico y lúdico. Más allá del acueducto romano, todo el paraje conforma un completo parque ecohistórico, con muchas actividades, visitas guiadas y servicios.

Podréis pasear por los rincones de sus jardines románticos, oler las plantas aromáticas, detectar los animales que viven, hacer un pícnic en las zonas reservadas para este uso ... y, como no, descubrir todos los secretos del Puente del Diablo. Construido durante el siglo I con grandes sillares formando una doble línea de arcadas, que le dan esa imagen tan imponente, tiene unos 217 metros de largo y es sólo un fragmento de la canalización que llevaba agua del Francolí desde la zona del Rourell hasta Tarraco.

Podréis pasear por debajo de los 25 arcos superiores y los once inferiores, y también por encima, disfrutando con detalle de esta espectacular obra de ingeniería romana. Disfrutaréis.

Con estas curiosidades, los niños tendrán la oportunidad de sumergirse en un emocionante viaje a través del tiempo mientras descubren los secretos del Pont del Diable. A medida que exploran este increíble lugar en Tarragona, no solo estarán divirtiéndose, sino que también estarán aprendiendo sobre la fascinante historia y la ingeniería ingeniosa que hay detrás de este antiguo puente romano.

El Pont del Diable es un impresionante testimonio de la ingeniería romana. Construido hace más de 2.000 años por los romanos, este puente es un ejemplo destacado de la habilidad y destreza de los antiguos arquitectos. Su longevidad y solidez demuestran la calidad de su construcción y su resistencia al paso del tiempo.

Una de las cosas más sorprendentes sobre el Pont del Diable es que no se construyó con cemento como los puentes modernos. En lugar de eso, los romanos utilizaron piedras encajadas con precisión para crear una estructura robusta y duradera. Este método de construcción demuestra la habilidad técnica de los constructores romanos y su capacidad para crear obras de arte duraderas.

El Pont del Diable destaca por su arquitectura imponente. Con unos arcos majestuosos que se alzan sobre el río Francolí, el puente es una obra maestra de la ingeniería y el diseño romanos. Sus detalles y su grandeza reflejan el poder y la grandeza del Imperio Romano en aquellos tiempos.

La leyenda del Pont del Diable es una historia fascinante que cautiva la imaginación de los niños. Según la leyenda, un pastor astuto engañó a una diablesa para construir el puente, utilizando su inteligencia para salir de la situación. Esta historia llena de misterio e intriga es un recordatorio del poder de la astucia y la determinación.

Desde el Pont del Diable, se pueden disfrutar de vistas espectaculares del paisaje natural que rodea Tarragona. Con el río Francolí fluyendo bajo sus arcos, el puente ofrece una panorámica única de la belleza natural de la zona. Es el escenario perfecto para un día de picnic y aventura en familia, mientras se contempla la magnificencia de los paisajes locales.

La historia del Pont del Diable es tan emocionante como un cuento de hadas.
Sucedió hace mucho tiempo, cuando las criaturas mágicas aún deambulaban por la tierra. Dicen que un pastor muy astuto se encontró con una diablesa al lado del río, y comenzó una conversación que nunca olvidaría.

La diablesa, con su sonrisa traviesa, ofreció al pastor construir un puente extraordinario a través del río a cambio del alma del primer ser vivo que lo cruzara. Pero el pastor, muy listo, pensó rápidamente. Aceptó el acuerdo, pero con una condición muy especial: el primero en cruzar el puente sería su perro, no un ser humano.

La diablesa, convencida de que ganaría, aceptó el truco. Miró con incredulidad cómo el perro del pastor se lanzaba hacia el puente, dejándola en estado de shock y enfurecida. Así nació el nombre del Pont del Diable, y la historia del pastor astuto se convirtió en leyenda, que se sigue contando en la actualidad.

Ahora, cada vez que caminéis sobre este puente lleno de misterio y encanto, podréis imaginar la leve risa del pastor y la diablesa, un recuerdo de un tiempo en el que los milagros eran tan reales como el sol que nos ilumina. ¿Quién sabe qué otros secretos y aventuras espera el Pont del Diable para las futuras generaciones de aventureros como vosotros?