Begur, un pueblo con encanto

Una vuelta por el núcleo de Begur os permitirá descubrir su legado medieval y, sobre todo, el legado de los que volvieron enriquecidos de hacer las Américas.

De Begur quizá conozcáis algunas de sus calas, como Sa Riera, Sa Tuna y Aiguablava. Hay hasta ocho, ideales para visitar con niños y, en parte, comunicadas por el camino de ronda.

Otro de los atractivos del municipio es el núcleo de Begur. Recorrer sus calles os permitirá conocer algunos de los momentos más importantes de su historia. De entrada, presidiendo el pueblo en lo alto de una colina veréis los restos del antiguo castillo medieval. Llegar es fácil, ya que desde el casco antiguo se trata de ir siguiendo las indicaciones, que siempre nos llevarán a lo más alto. Una vez en el castillo, veremos que no queda mucho, pero lo que sí vale realmente la pena son las vistas sobre buena parte de la Costa Brava y el Baix Empordà.

Del resto del núcleo es interesante descubrir las diferentes casas de los indianos, que durante el siglo XIX, en tiempos de crisis, fueron a América a hacer fortuna y volvieron enriquecidos. Para demostrar su progresión económica, construyeron atractivos edificios de estilo colonial.

Otro de los monumentos interesantes del núcleo de Begur son las torres de defensa del siglo XVI, construidas para evitar los asaltos de los piratas; la iglesia gótica, dedicada a Sant Pere, y edificios muy ligados a la vida cotidiana de la gente de Begur, como el Casino Cultural y las Escuelas Viejas.

La Feria de Indianos, uno de los mejores momentos para escaparse a Begur
Un buen momento para conocer esta época es visitar Begur durante la Feria de Indianos, que se celebra cada año a principios de septiembre.