5 miradores espectaculares de Catalunya para visitar con niños

Los miradores nos hacen sentir unos auténticos privilegiados y nos dan otra perspectiva de la vida. A menudo, aquí arriba nos sentimos más insignificantes y dejamos de preocuparnos por aquellas cosas que nos ocupan durante el día: la lista de la compra, mirar el móvil sin saber qué buscar o enfadarnos con Netflix cuando no encontramos nada que nos guste.

Los miradores son mágicos. Nos encontramos allá arriba, mirando el hortizonte y haciendo una inspiración muy profunda. Nos dan paz, tranquilidad y ayudan a ver la realidad con otros ojos.

En Catalunya hay muchos miradores. Desde Escapadaambnens hemos preparado una lista de 5 miradores espectaculares de Catalunya para visitar con niños. Evidentemente hay muchísimos más, pero estas cinco propuestas seguro que os gustarán.  

El Santuario de Santa María de Queralt se encuentra en Berga, capital del Berguedà y es conocido como uno de los balcones de Catalunya. Toda una declaración de intenciones. No hay ni que decir tiene que desde aquí tendremos unas vistas espectaculares. Se encuentra a 1200 metros de altura y en este balcón podemos disfrutar de unas vistas privilegiadas.

En el núcleo de Siurana, en el Priorat, encontraréis un pueblecito encantador y uno de los más bonitos de Catalunya. Nos encontramos casi en el límite del abismo, en lo alto de unas rocas verticales que son un mirador excelente de la comarca del Priorat. Tan sólo el trayecto, por una carretera tortuosa que sube y sube desde Cornudella, hasta llegar a 700 metros, ya vale la pena. 

A menudo cuando pensamos en miradores enseguida nos viene a la cabeza desplazarnos hasta el punto alto, en lo alto de una montaña, pero no siempre es así. En el Delta del Ebro encontramos auténticos miradores que nos permiten disfrutar de unas fantásticas panorámicas. Éste es el caso del Mirador del Zigurat, en Deltebre. Las puestas de sol desde aquí son espectaculares.

Mont-roig es un municipio con carácter situado en el Baix Camp y con mucha capacidad de sorprendernos. Os proponemos visitar la ermita de la Mare de Déu de la Roca, aquí encontraréis unas vistas panorámicas espectaculares sobre la Costa Daurada, pero lo que aún es más espectacular son las formas y los colores de sus rocas. Se puede llegar en coche. Precisamente, este paisaje fue fuente de inspiración del pintor Joan Miró.
Aquí también os sentiréis como Indiana Jones en Petra.

El Mirador del Drac es un lugar sorprendente, lleno de misterio y rodeado de una de las muchas leyendas que tienen como protagonista principal al dragón. Este espacio, un pequeño museo de esculturas al aire libre se encuentra en Villalonga de Ter, en el Ripollès. El Mirador del Drac ofrece un espectáculo de sonido y luz dos veces al día, al mediodía y por la noche. Una propuesta ideal para toda la familia.