Alt Camp con niños

Alt Camp es una comarca ideal para hacer una escapada con niños sin aglomeraciones. Las experiencias rurales y el enoturismo, muy adaptadas al público infantil, son algunos de los reclamos de una comarca que, por ser mayoritariamente plana, permite hacer caminatas cómodas y atractivas para todas las edades, con diversas áreas adaptadas para hacer una escapada de pícnic rodeada de bosque y campos.

De todos modos, Alt Camp también tiene montaña. Al este, en la zona de Querol, donde hay varias excursiones para hacer, sobre todo siguiendo el curso del río Gaià. Y, al oeste, en las montañas de Prades, que se asoman a la comarca en Mont-ral y Alcover. El río Glorieta, afluente del Francolí, dibuja parajes muy atractivos. En definitiva, un destino excelente para hacer escapadas llenas de naturaleza con niños.

Alt Camp también es un destino muy recomendable para hacer una escapada cultural con niños. La ruta del cister también es protagonista en esta comarca, con la visita imprescindible al monasterio de Santes Creus. Pero hay mucho más patrimonio en la comarca, no sólo ligado a la religión sino también en el mundo rural y sobre todo del vino, con las bodegas. Valls, su capital, condensa la tradición de las torres humanas y de "calçots" que tanta personalidad da a la comarca, además de acoger museos, rutas alrededor de figuras ilustres y una de las iglesias con el campanario más alto del país. Una comarca, en definitiva, muy al alcance de los más pequeños y con alguna sorpresa más para descubrir, y que reúne todos los ingredientes para hacer una escapada con niños.

No podéis iros del Alt Camp sin visitar los lugares más emblemáticos de la comarca, como por ejemplo, el Monasterio de Santes Creus y el santuarari de Montferri. Pero el Alt Camp también esconde sorpresas, menos conocidas, y auténticas joyas para disfrutar del patrimonio al aire libre y de una buena excursión en familia, como por ejemplo, la ruta de la Piedra Seca, el Niu del Águila y las Fuentes del Glorieta, un paseo alrededor del río Gaià y un pícnic en la Alameda de Santes Creus.